Aunque solamente los carentes de ética, señalan que no existe la publicidad buena ni la publicidad mala, sino que lo único que existe es la publicidad; resulta que María León con su enorme talento, no necesita de grandes estrategias publicitarias, ya que su presencia se vende por si sola; sin embargo los proyectos musicales y teatrales en que ha participado, la han arropado con citas a programas de televisión y entrevistas basadas en el respaldo publicitario de empresas teatrales y sellos disqueros con dichos procedimientos masivos. Más en www.somoselespectador.blogspot.com